A traves de la ventana veo la calle, un sol que amanece amarillo se refleja atraves de la bruma. Antenas de tv cubren las azoteas de las casas, y nadie por la calle. Un aire torrido corre apenas perceptible y toda esta imagen (con la figura del astro rey diluido por las nubes etereas, presidiendola) me da la sensación de desierto, como si me hubiera trasladado en el tiempo y en el espacio, despertando recuerdos de mi niñez en los que miraba desde la azotea de mi bloque de Heliopolis, mientras mi madre tendia la ropa, a todas esas casitas con sus antenas de tv, fascinantes, multitudes de ellas, rompiendo el horizonte desordenadamente.
Al salir a la calle me embarga una terrible sensación de soledad... como si anduviera por un desierto, como si esas casas, con sus antenas apuntando al cielo, no contuvieran vida, como si fuera una extranjera en una ciudad muerta. Sensaciones dormidas desde mi niñez.
Cielo blanco y sol amarillo suave...
miércoles, 17 de mayo de 2006
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