martes, 25 de marzo de 2008

Regreso después de Semana Santa


Vuelta a la rutina diaria después de unas vacaciones más que necesarias.

Se fueron los dolores de espalda y las contracturas al soplo de una nueva y refrescante brisa.

Brisa que corre a través del aire y que hace que la realidad cambie de perspectiva.

Y con el regreso, vuelven los hábitos… y, con ello, el paso de los días cómo si fueran copias unos de otros con ligeras variaciones. Y lo que parece una cárcel de rutina, bien llevado, se transforma en un sentimiento de estabilidad cuando se une al de plenitud, sintiendo que aprovechas el tiempo y que no dejas de lado aquellas pequeñas cosas que te llenan.

Imprescindible para ello tener, todos los días, unos momentos para sentarse, contemplativo, ante la vida y respirar…

2 comentarios:

Belén dijo...

Pues si mi niña, nada mejor que salir de la rutina y re-cargar pilas para volver a tomarlo todo con naturalidad :)

Y respirar, es esencial!

Besicos

Nébula dijo...

Con lo fácil que es escucharnos a nosotros mismos y respirar un rato tranquilos, y a veces se nos olvida o creemos que cualquier cosa es más importante que eso.